Miu Miu es una marca de lujo italiana que forma parte del Grupo Prada, fue desarrollada directamente por Miuccia Prada y fue una interpretación más joven y divertida de la estética de la tradicional Prada.
Los resultados financieros de la compañía muestran un crecimiento de las ventas en el primer trimestre del año del 89% respecto al año pasado, una hazaña inimaginable durante la reciente desaceleración de la industria de lujo. Cabe señalar que esto no corresponde a altas inversiones en distribución; al contrario, su estrategia en los últimos años ha sido reducir el número de tiendas físicas.
¿Qué está haciendo esta marca para ganar cada vez más seguidores y convertir su popularidad en ventas? Te explicamos su estrategia de negocio y lo que puedes aprender de ellos.
1) Toma de riesgos:
Miuccia Prada describe la marca Prada como “la parte más seria de ella misma” y Miu Miu como su “campo de juego experimental”. Prada es una marca con más herencia creada por su familia y con una imagen consolidada que se debe cuidar, pero Miu Miu es la plataforma que ha utilizado para arriesgarse y crear lo que quiere.
Comenzó como un emprendimiento de moda que le permitió probar el mercado con un concepto innovador y descubrió que a la gente le gustaba. Colores y estampados vibrantes, diseños diferentes y no tener miedo de crear conversaciones y controversias ha ayudado a Miu Miu a ganarse un alma independiente y el cariño de los consumidores.
Las nuevas marcas deben diferenciarse de la competencia y no tener miedo de generar conversaciones. Traer algo nuevo a la mesa y una personalidad clara son factores importantes para que las marcas puedan notarse en momentos en que los consumidores tienen tantas distracciones. En este caso, no tener miedo de correr riesgos y conectarse con comunidades específicas es mejor que tratar de complacer a todos los consumidores, pero ser incapaz de crear una base de fans que apoye y promueva la marca.
2) Enviar un mensaje claro:
Miu Miu inició como una marca más arriesgada para un público más joven. Fue la entrada al lujo para una generación que buscaba algo nuevo y diferente. La gerencia sabía que la clientela de Prada y Miu Miu no era la misma ya que su producto y mensaje siempre ha tratado de ser independiente.
Sin embargo, entendiendo que la generación X y los Millennials han sido los consumidores target de la marca y a través de los años han permanecido fieles, Miu Miu cambió el cliente objetivo no solo a las personas más jóvenes sino a personas con una actitud juvenil, ampliando su público, pero al mismo tiempo teniendo claridad en quién es su consumidor. Ya no se trata de edad sino de personalidad y comportamientos.
3) Resiliencia:
Miu Miu es una marca nacida hace poco más de 30 años, conocida desde sus inicios por los más fanáticos de la moda, pero en los últimos años ganando bastante popularidad en el resto del mundo. Lograr un éxito sostenido requiere tiempo y trabajo duro. Esta marca nació como la hermana pequeña de Prada y les llevó un tiempo ser reconocidos como independientes. La toma de decisiones acertadas ante la adversidad, como por ejemplo un desfile de moda en medio de una montaña de nieve en Italia para preservar las medidas del COVID-19, demuestra la fortaleza y conveniente obstinación de la empresa.
La resiliencia corporativa proviene de la gerencia y de su ambición de triunfar. Se trata de encontrar siempre la manera de continuar incluso cuando el horizonte no parece tan claro o positivo. Es una apuesta que, si se juega bien, traerá recompensas.
4) Colaboraciones estratégicas:
Es mejor compartir ganancias que ser dueño de todas las pérdidas. Miu Miu sabe cómo desarrollar las alianzas adecuadas para crear reconocimiento y posicionamiento de marca. Estas asociaciones se han producido a lo largo de los años con marcas de amplio conocimiento como por ejemplo New Balance, además de embajadores que representan bien los valores de la compañía y atraen a nuevos consumidores.
Las colaboraciones son comunes en la industria, pero se deben hacer con compañías que estén en el mismo nivel de la empresa o uno superior, o que traigan un valor añadido sobre algo ya identificado que hace falta, por ejemplo, Brand Awareness en un nuevo mercado que se espera perseguir. Esto es especialmente importante para una marca que desea crear conciencia sin correr el riesgo de dañar la identidad o la percepción ante el consumidor.
5) Autenticidad:
Miuccia Prada fue comunista y no tiene miedo de decirlo, además, ha criticado en múltiples ocasiones la sociedad burguesa y la belleza convencional, elementos claves en la tradicional industria del lujo.
Miuccia, PhD. en Ciencias Políticas, no teme hacer declaraciones y opinar sobre temas delicados. Para algunas personas, la moda puede parecer superficial, pero para ella debe analizarse intelectualmente, en un sentido de comunidad, cultura y responsabilidad social.
Miu Miu fue una marca creada para ella y que tiene estampado en su espíritu los rasgos de su creador. Es mejor para una marca tener discípulos y contradictores que querer complacer a todos y volverse fácilmente irrelevante.
Con sus diseños sugerentes, mezclas disruptivas de colores y patrones, y un mensaje coherente y claro, ha logrado ganarse su lugar dentro de la industria y demostrar que incluso en tiempos difíciles, es posible obtener resultados superiores a los esperados y aprovechar el potencial de uno de los negocios más resilientes.
